Cada 21 de septiembre se recuerda el Día Mundial del Alzheimer con la intención de combatir la enfermedad con prevención y promoción. Desde la Facultad tienen proyectado además realizar capacitación a quienes deben atravesar la difícil situación de cuidar a un paciente con este mal.
El Día Mundial del Alzheimer nos recuerda que la enfermedad se manifiesta cada vez más en un mayor número de personas, por lo tanto, es necesario hacer hincapié en la prevención y detección, pues antes de que llegue a mostrarse con todos sus síntomas, hay detalles como la pérdida de memoria que advierten sobre el problema. Esto puede ser combatido de forma eficaz según algunos estudios, por lo que es interesante acercarse a ello.
La Directora del Departamento de Salud Mental de la Facultad de Medicina de la UNNE, Lila Almirón aseveró que se habla de prevención y promoción de la salud cuando “queremos prevenir y de esta forma tomamos distintas acciones: las recomendaciones son siempre para ejercitar la capacidad cognitiva, pero esta es una enfermedad que tiene un componente genético, tiene antecedentes familiares; es decir, además del envejecimiento normal hay una acumulación de ciertas sustancias en el cerebro”.
Lo importante a destacar es que la persona que tiene una demencia va perdiendo paulatinamente su capacidad de estar en contacto con la realidad. “Lo primero que pierde es la memoria reciente detalles como: qué almorcé hoy, que cené anoche, que hice esta mañana. Después se da una pérdida de orientación (no se acuerda dónde está); se pierde por momentos, hasta que la persona disipa cada vez más sus capacidades funcionales “, explicó la docente quien confesó que se habla de un Alzheimer temprano desde los 60 y después de los 70. “El que aparece más tempranamente es el que tiene mayor carga heredo familiar”, dijo.
La importancia de hablar del cuidado al cuidador
Al hacer referencia a la enfermedad, el Profesor Pablo Díaz mencionó la importancia de la contención familiar y del cuidado a quien será la persona que se dedicará a la atención del paciente con Alzheimer. De esta manera, menciono estudios de la Organización Mundial de la Salud y de la Unión Europea que se realizaron y se observan ciertos rasgos a tener en cuenta sobre la persona que va a ocupar ese lugar. Puede ser un hijo/a, un sobrino/a, nieto/a, una mujer, un marido.
“Empezamos a ver a un adulto mayor que esta con una desorientación espacial pero no solamente queda en este adulto mayor sino también en el que lo cuida; es decir la contención familiar” dijo Díaz al mismo tiempo que advirtió sobre “enfermedades, patologías o los trastornos que genera la persona que está cuidando a la persona con Alzheimer es decir cuáles son los riesgos que van a enfrentar los que van a estar en este rol.
Hasta hace un tiempo se pensaba que el desgaste iba a estar basado en la cuestión física: en el agotamiento, pero ahora también se está mostrando, con evidencia científica, el agotamiento psíquico; es así que se debe cuidar su alimentación, su aseo personal, el seguimiento paulatino con el médico y además debe tener herramientas para poder llevar esta gran carga. Es por ello que desde la Facultad de Medicina de la UNNE se están proyectando realizar diversos cursos y capacitaciones sobre formación para cuidadores con demencia (y otras patologías) “para brindar las herramientas necesarias porque llega un momento que se dice ‘ya no se mas que hacer” , reconocieron los profesionales.
Corrientes, 21 de setiembre de 2019
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