ACCIDENTE
CEREBROVASCULAR DE ORIGEN CARDIOEMBOLICO: REVISION
Prof. Dr.
Miguel H. Ramos.
Sres.: Silvestre
D. Svriz, Hernan A. Pintos, Santiago A. Piceda (Alumnos de la Cátedra
VI Medicina)
INTRODUCCION
Aproximadamente el
80% de los Accidentes Cerebrovasculares (A.C.V.) se debe a un infarto Isquémico
cerebral (1), pero solo el 30 % es de origen cardioembólico,
el cual se debe a la migración de un embolo proveniente de las cavidades
cardíacas o del segmento proximal de la aorta torácica. Mientras
que el 70 % restante se produce como consecuencia de patologías
de pequeños o grandes vasos de la circulación cerebral. (2-3)
La prevalencia del
A.V.C. Isquémico aumenta con la edad y si bien es infrecuente en
personas menores de 45 años (4% del total de los ACV isquémicos),
la cardioembolia adquiere mayor importancia y es más común
en personas mayores de 75 años (4).
DEFINICION
Al ACV Isquémico
de origen Cardioembólico se lo ha definido "como la presencia de
una fuente potencial de cardioembolia en ausencia de enfermedad cerebrovascular,
en un paciente con accidente isquémico (5)
FACTORES DE RIESGO
FISIOPATOLOGIA
DE LA ISQUERIA CEREBRAL Y EL INFARTO ISQUEMICO
El cerebro requiere
para cumplir con sus funciones que el flujo sanguíneo cerebral (FSC)
sea constante y permanente. Normalmente el FSC es aproximadamente de 65
ml/ m / 100grs de tejido, este puede modificarse dependiendo de la rapidez
y el grado de obstrucción que sufre el vaso.
Si el FSC cae por debajo
de 25 ml/m/100 gr. de tejido cerebral, y la circulación se establece
a corto plazo, las funciones cerebrales se recuperan, si por el contrario
el FSC cae por debajo de 10 – 12 ml/ m / 100 gr., independientemente del
tiempo de duración se desencadenan los procesos irreversibles del
infarto cerebral.
En el infarto se producen
básicamente dos fenómenos fisiopatológicos, uno de
ellos es la Hipoxia Tisular debido a la obstrucción vascular, y
por otro lado las alteraciones metabólicas de las neuronas debido
a la abolición de los procesos enzimáticos. Estas alteraciones
metabólicas dañan la membrana celular, permitiendo la brusca
entrada de la Na+ a la célula seguido del ingreso de
Ca + y la salida en forma abrupta del potasio al medio extracelular.
El resultado final es el edema celular irreversible.
Hay factores que interfieren
en la producción del infarto cerebral y en su extensión modificando
el tiempo de aparición de la isquemia y son:
CAUSAS DE
CARIOEMBOLISMO
CLINICA
El cuadro clínico
va a depender del sector arterial comprometido y el mecanismo que lo produce.
El accidente embólico es de comienzo brusco y el cuadro clínico
evoluciona en pocos segundos, y generalmente no hay signos de advertencia.
Si bien puede presentarse en cualquier momento del día, el mayor
peligro se da cuando el paciente se incorpora.
Si el territorio comprometido
es el carotídeo predominan los signos unilaterales presentando hemiplejía,
hemianestesia, hemianopsia, afasia y agnosia de cierto tipo. Mientras que
si el afectado es el territorio Vertebrobasilar los signos suelen ser bilaterales,
presentando cuadriparesia, hemiparesia, trastornos sensitivos bilateral,
con parálisis de los Nervios Craneales y otros signos de afección
del tronco cerebral o cerebelo. (8).
La arteria más
frecuentemente afectada por los émbolos de origen cardiogénicos
es la Arteria Cerebral Media. Que se manifiesta por los siguientes síndromes:
DIAGNOSTICO
SOSPECHA CLINICA
DE CARDIOEMBOLISMO
La localización
de la isquemia, el comienzo abrupto de los síntomas la disminución
del nivel de conciencia y la ausencia de patología aterosclerótica
cerebro vascular puede ser de utilidad para sospechar cardoembolismo, pero
ninguno de ellos es adecuado para llegar al diagnóstico definitivo
sin la ayuda de los exámenes complementarios.
El ACV cardioembólico
tiene características que lo distinguen de los otro tipos de ACV
isquémico como ser:
METODOS AUXILARES
DE DIAGNOSTICO
La Tomografía
Axial Computada (TAC): Puede brindar datos, pero ninguno de ellos es altamente
específico para diagnosticar ACV cardioembólico.
Los más característicos
son:
a. Infarto córtico-subcortical (en territorio de arterias terminales) cerebral o cerebeloso, único o múltiple.La RESONANCIA NUCLEAR MAGNÉTICA (RNM): Es más sensible que la TAC, para detectar los cambios isquémicos más precoces que ocurren en cerebro, cerebelo y en especial en el tronco encefálico, como así también para detectar la transformación hemorrágico, pero tiene la desventaja del alto costo.
b. Transformación hemorrágica del infarto isquémico.
a. Ausencia de patología ateromatosa en el territorio vascular comprometido o en vasos del cuello (demostrados con angiografía cerebral o eco Doppler)EL DOPPLER TRANSCRANEANO: Puede ser útil en el diagnóstico de embolia cerebral, ya que en presencia de una oclusión arterial aguda no detecta flujo, y la presencia de flujo en un Doppler Posterior permite inferir este mecanismo debido a que las oclusiones trombóticas habitualmente no se recanalizan.
b. Imagen de trombo endovascular, convexo hacia la luz, en la angiografía temprana (menos de 48 horas) de la arteria de la región afectada.
c. El diagnóstico se refuerza si esta imagen desaparece en una angiografía posterior, lo que indica la recanalización del embolo. Sin embargo hay consenso en que no es necesario realizar una arteriografía con fines diagnósticos, especialmente durante la fase aguda del ACV.
TRATAMIENTO MEDICO
DURANTE LA FASE AGUDA DEL ICTUS ISQUEMICO
Se basa en las siguientes
medidas:
a. OxigenoterapiaLa aspirina en dosis de 325 mg/ día es el fármaco más utilizado para prevenir los accidentes vasculares trombóticos y embólicos y el IAM. En los pacientes que no toleran la aspirina se puede usar la ticlopidina 250 mg / 2 veces / día. (8)
b. Estabilización Hemodinámica
c. Antiagregantes plaquetarios: se han usado en el intento de disminuir la recurrencia del embolismo y limitar la extensión del coagulo.
a. Control de la TA: En más de un estudio se ha demostrado la correlación que existe entre la progresión del infarto y la presión arterial sistólica. Con cada 20 mm hg de aumento de la TAS el riesgo de progresión del infarto disminuye en un 0,66%. Por este motivo en el período agudo del infarto cerebral, la hipertensión solo debe tratarse si la TAD supera los 110 – 120 mmHg. (6)
b. Tto del edema cerebral y presión intracraneana elevada: se utiliza manitol por vía intravenosa a dosis de 1 gr./kg. y a continuación 50 gr. cada 2 a 3 hs para detener el deterioro ulterior.
PREVENCION
DEL ACV CARDIOEMBOLICO
El advenimiento del
Ecotransesofágico ha contribuido a la prevención primaria
en pacientes asitomáticos con cardiopatía de alto riesgo
embólico y a la prevención secundaria en pacientes que han
sufrido un TIA o un infarto cerebral Isquémico. En la mayoría
de los pacientes con ACV cardioembólico la prevención secundaria
se basa en la administración de anticoagulantes, a excepción
del mixoma que requiere cirugía y la endocarditis infecciosa que
requiere ATB.
En pacientes en los
cuales la anticoagulación no es posible puede resultar útil
la aspirina (325 mg/d) para la prevención primaria de las fibrilación
auricular no reumática y bajo riesgo de embolia (4).
En los casos de Fibrilación
Auricular de iniciación reciente se debe tratar de restablecer el
ritmo sinusal normal mediante el empleo de cardioversión eléctrica
o con fármacos antiarrítmicos, en caso que no haya respuesta
con estas medidas se recomienda el tratamiento anticoagulante profiláctico
(8).
También es importante
el control de los factores de riesgo como: Hipertensión Arterial,
dislipidemia, diabetes y el hábito de fumar.
BIBLIOGRAFIA
1. Isselbacher, Braunwald, Wilson Martín Fauci, Kasper, Harrison: Principios de Medicina Interna: 13 Edición. Vol. II 2570-2596
2. Seward Jb, Khandheria BK, Oh JK y col. Transesophageal echocardiography: technique, anatomic correlations, implementation, and clinical applications. Mayo Clin Proc 1988,63-649
3. Ferro JM, Crespo M, Young adult stroke neurophysiological dysfunction and recovery. Stroke 1988,19-982
4. Carlos A. Bertolasi, Carlos Barrero, Graciela Gimeno, Guillermo Liniado, Victor Mauro: Cardiología 2000. año 1997, Unidad II, Sección 8: 645-647
5. Cardiogenic brain embolism. The second report of the Cerebral Embolism Task Force. Arch Neurol 1989; 46:727-743
6. Burton W. Lee, MD, Stephen I, HSU MD Ph D David S. Stasior MD, MPP, Medicina basada en la Evidencia: Massachusetts General Hospital Año: 1999: 645-657
7. Amarenco P, Cohen A, Tzourio C, et al. Atherosclerotic disease of the aortic arch and the risk of ischemic stroke. N Engl J Med 1994; 33l 1474-1479
8. Raymond D. Adams, MA, MD Maurice Victor Allan H. Ropper. Principios de Neurología. 1999. 6 edición, Fascículo VI: 674-720
9. Bogousslavsky J, Van Melle G, Regli R, et al. Pathogenesis os anterior circulation stroke in patients with nonvalvular atrial fibrillation: the Lausanne Stroke Registry. Neurology 1990; 40:1046-1050
10. Ricardo A. Miglione, Hugo Grancelli, Sara Berensztein y col. Revista Argentina de Cardiología. Volumen 68 – Suplemento I 2000: 30-32