Revista de Posgrado de la VIa Cátedra de Medicina - N° 128 – Junio 2003

Pág. 6-10

 

INFORMACION MEDICA EN INTERNET

Prof. Dr. Miguel H. Ramos

 

INTRODUCCION

Tratar de conocer el significado de la palabra Información conlleva aceptar varias definiciones.

Según la Real Academia Española (1) es la comunicación o adquisición de conocimiento que permite ampliar o precisar los que se poseen sobre una materia determinada.

Puede llamarse información a todo suceso capaz de transmitir conocimiento entre un emisor y un receptor a través de un medio de comunicación (2).

Es importante establecer la diferencia entre dato e información. Entendemos por dato, el registro de un hecho o circunstancia. La información es un registro o conjunto de registros, confiables y oportunos, sobre hechos o circunstancias sistematizados con un sentido, es decir, con valor agregado. Según el Prof. Dr. “Gómez Rinesi JF. 2002” el dato cuando presta alguna utilidad se transforma en información.

La disciplina científica llamada Teoría de la Información estudia la creación, el manejo y la transmisión de los datos entre distintos sistemas dentro de un medio. El estadounidense Claude E. Shannon en 1948 estructuró y sistematizó este campo de conocimiento y expuso un método para medir la cantidad de información contenida en un mensaje. De acuerdo con su teoría, información es todo aquello que reduce la incertidumbre entre varias posibles alternativas.

En relación con el manejo automático de la información surge la Informática, que es el conjunto de conocimientos científicos y técnicos que hacen posible el tratamiento automático de la información por medio de ordenadores.

Relacionado con la transmisión de la información se halla la Cibernética. Es la ciencia que estudia los procesos de control y comunicación, así como la relación entre ellos, en los seres vivos y en las máquinas. Es la ciencia de los sistemas autoadaptativos cuya preocupación son los fenómenos de retroacción (feedback) (3).

John Naisbitt, afirma que en los Estados Unidos han pasado de tener una economía industrial, a tener una economía basada en la información. Aporta un dato: el 65 % de la fuerza laboral del país se ocupa de procesar o producir información, mientras en 1950 solo lo hacía el 17 % (4).

Con respecto a información médica, la habilidad en la búsqueda y valoración de esta información determinará la efectividad clínica.

La información médica actualmente se nos presenta en exceso y en forma desordenada al extremo de provocar una intoxicación llamada “infoxicación” médica. La destreza para rechazar lo irrelevante y absurdo, evitar a los comerciantes y gastar el mínimo del precioso tiempo del que se dispone, en la búsqueda de la evidencia más significativa, son las habilidades que destacan a un médico de otro. Hasta hace aproximadamente veinte años atrás, el gran maestro en medicina era el que tenía acceso, por canales especiales, a información actualizada, la cual se hallaba restringida a unos pocos. Hoy con la globalización y democratización de la información que representa INTERNET, el gran maestro en medicina, es el que sale ileso de la avalancha de información y maneja los criterios de selección a la perfección.

Así como el pasar de los años provoca experiencia que permite una mayor capacidad para el reconocimiento del patrón diagnóstico y la aplicación de la propuesta hipotético-deductiva, también provoca un deterioro en nuestros conocimientos, tanto porque se olvida como porque se falla en aprender nuevos hechos a medida que surgen. Se deja de estar al corriente sobre los avances en diagnóstico y terapéutica, y a menudo se continúa aplicando los viejos tratamientos aprendidos en lugar de los más nuevos y efectivos. El médico tiene la tendencia de continuar tomando las misma decisiones terapéuticas que aprendió de sus maestros, y tiende a no modificar estas decisiones, aún cuando la evidencia posterior dicta que debería hacerlo, no ha aprendido cómo decidir cuando una práctica médica deja de estar actualizada y necesita ser cambiada.

Mantenerse actualizado en medicina es una tarea terrible afirma Sackett (5) y podemos dividirla en actualización basada en el examen regular de la literatura para un buen mantenimiento, y la basada en la búsqueda de información para resolver un problema clínico. Esta última tiene mayor utilidad porque perdura en nuestra memoria por más tiempo.

En general los médicos no tienen una forma sistematizada para la búsqueda de información (6). La técnica que se utilice debería hallar el o los mejores artículos publicados sobre el problema clínico con un proceso lo suficientemente rápido como para acortar la espera del enfermo.

Habitualmente la forma de actualización de los médicos según Sackett es por: (5)

1.       Consulta a colega.

2.       Revisión de biblioteca personal.

3.       Visita a biblioteca médica.

4.       Búsqueda bibliográfica electrónica.

Afirma, a modo de resaltar la importancia de la bibliografía electrónica, que la era moderna de la información divide a los médicos en los que realizan investigación electrónica y los que pertenecen a una casta en extinción llamados Luddites de la información (los Luddites, eran un grupo de trabajadores ingleses, a comienzo del 1800, que eran partidarios de destruir las máquinas durante la revolución industrial. Ned Ludd era un obrero textil que en 1799 destrozó un telar mecánico) (3).

Ely JW et al.(7) del departamento de Medicina Familiar de la Universidad de Missouri, Columbia publicó en 1992, luego de observar a 30 Médicos de Familia realizar 602 consultas durante un total de 172 hs. Que estos realizan en promedio una pregunta, que necesita información actualizada, de cada 15 enfermos que examinan y que son pocas las preguntas resueltas y a su vez pocas las que obtienen una respuesta específica y que el método más frecuentemente utilizado para resolver el problema, es la consulta rápida al colega o a un libro y no a revistas ni computadoras.

 

Nacimiento de Internet

La primera forma de transmitir la información fue la oral, luego vino la escrita con gran auge a partir de la creación de la imprenta. Actualmente, gracias a las computadoras, a través de multimedias. Estas modificaron sustancialmente la forma de aprendizaje dado que el mensaje impresiona varios de nuestros sentidos en forma simultánea y la información es aprehendida en forma más directa, intuitiva e instantánea (8)

La difusión masiva de información electrónica multimedial se logró con INTERNET. El nombre nace de la unión de la palabras International Net (Red Internacional).

Investigar su nacimiento según Nora Oliveri (9), sería remontarse al lanzamiento del satélite artificial Sputnik, por la Unión Soviética en 1957, que motivo en los EEUU, la creación de una nueva agencia de defensa, dependiente del Pentágono, llamada ARPA: Advanced Research Proyect Agency (Agencia de Investigación de Proyectos Avanzados).

Licklider JCR que trabajó como director de esta nueva agencia, fue uno de los primeros del mundo en darse cuenta que la computadora era en realidad un artefacto de comunicación y desarrolló su idea en dos trabajos, Man-Computer Symbiosis y The Computer as a Communication Device.

Otro motivo para continuar con el desarrollo de una nueva vía de comunicación, durante la llamada Guerra Fría, fue el pánico que provocó en los Estados Unidos el sabotaje de las tres torres de microondas en Utah en 1961. El miedo de ataques terroristas que podrían dejar al país sin medios de comunicación fomentó la búsqueda de un sistema de comunicación que sobreviviera a una guerra nuclear, destinando fondos para este fin a grupos de trabajo integrado por las Fuerzas Armadas y las Universidades.

En 1967 fue constituido por Larry Roberts el grupo de trabajo Network Working Group (NWG). Participaron de las primeras conexiones las Universidades de Santa Bárbara (UCSB), Stanford, Los Angeles (UCLA), Utha, y la Rand Corporation.

En junio de 1968 se destinaron fondos para la construcción de la primera red llamada ARPANET. Los primeros cuatro nodos de ARPANET estaban instalados y en funcionamiento en diciembre de 1969 (UCLA, Stanford, UCSB y Utah). Luego viene un período de conflictos entre las compañías de teléfono, los militares y las Universidades.

Para el año 1972 surge la idea de un protocolo de control de transmisiones (TCP) y de protocolo de internet (IP). El pensamiento qué está detrás del TCP/IP surge de la misma creencia de que las redes proliferarán de una manera más o menos anárquica. Si ha de surgir orden del caos, sólo puede aparecer sobre los cimientos anárquicos y a pesar de ellos. ARPANET comenzó a adoptar la TCP después de 1974 y se considera a esta época como nacimiento teórico de Internet .

Internet es realmente un fenómeno de la historia y un ejemplo del tipo de resultado que puede generar la complejidad caótica y la autoorganización o la autopoiesis.

En 1979 la Universidad de Wisconsin decide organizar una red distinta para compensar el hecho de que no estaban conectadas con ARPANET. Así nació CSNET.

Y entre 1980 y 1983 se unen ARPANET con CSNET según protocolos TCP/IP y esta unión puede ser considerada como el nacimiento práctico de Internet en contraste con su nacimiento teórico en 1974.

Su difusión masiva es auspiciada inicialmente, en 1993, por el vicepresidente estadounidense Al Gore (3).

Los adelantos posteriores, transformaron Internet en un servicio como la electricidad y el teléfono.

TCP/IP es el lenguaje vehicular utilizado por todas la computadoras del mundo y de hecho, de aquí en adelante pertenece a toda la humanidad, y debe ser preservado como tal, apreciado y alimentado de manera que se garantice su crecimiento.

 

Internet en la Facultad de Medicina de la UNNE

La historia de Internet en la Facultad de Medicina de la UNNE se remonta al año 1993 cuando el Prof. Dr. Gómez Rinesi JF elabora el anteproyecto de creación del Area de Informática Médica y en la sesión del día 11/11/93 el Consejo Directivo resuelve crear el área y designar a dicho profesor como organizador, teniendo a su cargo la planificación de las actividades (Resolución N. 1586-C.D./93).

A principio de 1994 el área de Informática sólo contaba con una computadora que tenía correo electrónico por modem y se hallaba conectada a la Red de Salud ( SLD).

En el año 1996 se adquieren dos computadoras que se conectan por primera vez a Internet a través de la Red Interuniversitaria (RIU) y se habilita un sitio en la Red. La Facultad de Medicina de la UNNE inaugura su página en Internet en ese año.

Internet crece vertiginosamente en todo el país, mejorando notablemente su servicio, lo que posibilita el desarrollo de nuevas estrategias de difusión del conocimiento sobre todo en medicina, marcando un hito el Primer Congreso Virtual de Cardiología 1999-2000 organizado por la Federación Argentina de Cardiología que contó con 7574 inscriptos de 95 países (10).

En el año 2001, la Facultad de Medicina de la UNNE inaugura la nueva Biblioteca, destinando parte de sus instalaciones al Area de Informática e incorpora veinte computadoras todas conectadas a Internet, lo que permite intensificar la formación de recursos humanos capacitados en esta área tecnológica, tanto a nivel docente, estudiantil y no docente.

 

Calidad de la información médica en Internet

Con respecto a la calidad de la información sobre salud hay en Internet, una amplia gama, pero la regulación no es la solución. El escepticismo y la perplejidad asociada a Internet son directa consecuencia de la naturaleza humana más que de la tecnología.

Los pacientes buscan a menudo información pragmática tanto como cuán larga será su enfermedad, para prevenir su repercusión laboral, más que detalles científicos. Los sitios más populares no se correlacionan con los estándares de calidad y los consumidores no siempre miran los sellos de aprobación.

En Internet podemos encontrar desde narraciones personales de enfermos, hasta revistas científicas de prestigio internacional. Es un desafío definir un estandar simple de calidad para tan disparatada colección de recursos, pues diferentes usuarios pueden tener distintos criterios de calidad. Mientras que los pacientes pueden necesitar una simple explicación y reaseguro, los profesionales de la salud pueden necesitar los resultados de los ensayos clínicos. Por todo esto, regular la información en Internet no parece ser la estrategia más correcta para mejorar la calidad. Una aproximación sería educar a los productores de estos contenidos, pero tal iniciativa no debería trabar la evolución de la comunidad en cuanto a recursos y procesos que mejoran el éxito en los cuidados de salud.

Según una revisión sistemática de Bessell TL y col.(11) pese a el uso masivo de Internet para obtener información médica, hay una completa carencia de evidencias de los efectos que ésta pueda tener sobre salud referida fundamentalmente a conocimiento, actitud, toma de decisiones y satisfacción del usuario. De todas maneras Loring KR y col. (12) publicaron un estudio randomizado sobre si los Grupos de Discusión por E-mail mejoran el estado de salud y bajan los costos en los paciente con dolor de espalda, concluyendo que estos pueden actuar positivamente en el estado de salud de los pacientes y bajar los costos y que podría tener un lugar en el tratamiento del dolor de espalda recurrente.

Según Johnson KB (13) en los médicos, la principal barrera que impide la adopción de información electrónica, pasa por el escaso conocimiento y entrenamiento en la búsqueda de la misma. Cabell CH (14) concluye que con una simple intervención educacional se puede incrementar la actividad de búsqueda.

Cuando procedemos a realizar una búsqueda de información médica por Internet, debemos basarnos sobre cuestiones de nuestra práctica. Es fundamental definir el interrogante clínico del que se quiere una respuesta, el mismo puede ser costoso, frustrante, y embarazoso de descubrir. De modo que el primer paso es escribir aparte la pregunta clínica exacta de la que se quiere respuesta y hacerlo en los términos más específicos posible para luego poder seleccionar las palabras clave. Según Verhoeven A y col (6) para los médicos la mayor dificultad en la búsqueda electrónica pasa por la correcta selección de las palabras clave.

Antes de enumerar los caminos que sugerimos para una búsqueda eficaz de información medica en Internet, debemos tener presente como premisas que debemos recurrir siempre a material que haya sido previamente seleccionado y evaluado por pares y que incluso aquellos materiales seleccionados por expertos muchas veces no cumplen los criterios metodológicos para los cuales fueron creados. Según estudios realizados a revistas médicas importantes, del total de artículos publicados en cada una de ellas, solamente el 7 % (dos o tres) cumplen rigurosamente todos requisitos del método científico de acuerdo al propósito por el cual fue redactado (5).

Según Droste S. (15) una búsqueda sistemática o metodológica de información médica tiene varios pasos que incluyen especificación de la metodología y de los criterios de inclusión y exclusión, selección de una base de datos, preparación de la pregunta y verificación de la búsqueda. La investigación bibliográfica sistemática implica una vía especialmente jerárquica y normatizada.

Para combatir la entropía clínica, hoy por hoy la estrategia pasa por :

1.  Consultar base de datos de prestigio.

2.  Revisar información suministrada por Universidades, Sociedades Científicas y Organizaciones Internacionales de Salud.

Don Fallis y Martin Frické (16) identificaron tres indicadores de seguridad en la calidad de la información : que tenga impreso el logotipo de HONcode, que sea propiedad de una organización y que tenga copyright.

 

Base de datos de publicaciones médicas

Las bases de datos consultadas frecuentemente son :

MEDLINE: Base de datos de la National Library of Medicine (Biblioteca Nacional de Medicina de los EEUU).

EMBASE: Recopila artículos de origen europeo y tiene su sede en Holanda.

CINAHL: Base de datos de enfermería y relacionados en salud.

LILACS: Base de datos de Literatura Latino-Americana y del Caribe en Ciencias de la Salud.

Medline (www.ncbi.nlm.nih.gov/entrez/pubmed)

Fue la primera base de datos con valor agregado disponible, en redes de trabajo, por la ancha vía nacional de telecomunicaciones de EEUU. Es una base de datos en ingles, online desde 1991 y gratuita en Internet desde 1997, contiene información seleccionada desde el año 1960 y continúa incorporando datos de años anteriores, totalizando a la fecha unos 12.000.000 de artículos de 4.500 revistas de unos 70 países aproximadamente. Su buscador es el PubMed, que permite localizar los trabajos utilizando : palabras clave ; nombre y apellido del autor o bien nombre de la revista donde fue publicado.

Cuando utilizamos palabras clave para la búsqueda, es preferible hacerlo a través del servidor del PunMed llamado MeSH Browser (búsqueda de encabezamientos por tópicos médicos). El Medline es una base de datos en que cada referencia de la literatura médica es indexada bajo un vocabulario controlado llamado Medical Subjet Heading (MeSH Browser) Este encabezamiento es la llave que abre la literatura médica y es aplicado por la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos desde hace 41 años En el MeSH Brwser se puede escribir el término en inglés o en castellano y la computadora nos presentará los temas indexados que están relacionados al mismo (no es un traductor). Marcando el tema que nos interesa, inmediatamente nos da su definición y la posibilidad de estrechar la búsqueda, presentando en pantalla los tópicos o subtemas en que se halla dividido. Elegido los tópicos de interés la computadora nos proveerá todos los artículos publicados sobre el tema.

Cuando el número de trabajos encontrados, siguiendo los pasos anteriores, es muy elevado, podemos recurrir a otro servicio del PubMed llamado Limit para limitar la búsqueda según : Edad, sexo, idioma original, tipo y año de publicación dando como resultado la presentación de un número reducido de artículos, que permitirá leerlos en menor tiempo. Con un mínimo de entrenamiento la búsqueda en el MEDLINE no pude llevar más de tres minutos (5).

Según McKibbon KA (17) las evidencias sugieren que el Medline es una conveniente e importante herramienta clínica que puede mejorar el cuidado y la salud del paciente.

Klein MS y col. (18) realizaron un estudio prospectivo en el año 1990 en tres Hospitales pediátricos de Míchigan, Detroit donde evidenciaron que el uso temprano del Medline para búsqueda de información sobre el caso, disminuían los días de internación y el costo de la misma.

Un estudio realizado en el año 1993 con estudiantes por Pao ML y col.(19) en la Universidad de Michigan demostró que la efectividad de la búsqueda en el Medline se relacionaba con experiencia previa en la misma y no con el grado de conocimiento clínico del problema y que aquel estudiante que durante los primeros años de su carrera realiza 1.5 sesiones de búsqueda por mes tiene, antes de comenzar la búsqueda de información sobre un tema, la probabilidad de 8.27 :1 de encontrar al menos un artículo relevante.

El resultado de una encuesta realizada, a fines de 1995, a los usuario de la NLM demostró que solo el 26 % de los clientes con acceso a Internet utilizaban Medline por esta vía (20). Según una encuesta realizada en 1999 por Stefan J. Chimoskey y col. (21) a médicos rurales del estado de Washington solamente el 40 % usa Medline para solucionar problemas clínicos a pesar que el 70 % la considera una herramienta muy útil. La mayoría soluciona sus interrogantes clínicos consultando a colegas o libros.

 

Publicaciones de universidades, Sociedades Científicas y Organizaciones Internacionales.

Para continuar con nuestra meta de búsqueda de información médica calificada en Internet, luego de revisar las bases de datos, tendríamos que visitar los sitios de Universidades, Sociedades Científicas y Organizaciones internacionales de Salud.

Para acceder a las direcciones electrónicas de estas entidades podemos utilizar los buscadores más conocidos de la red como Google o Yahoo. Escribiendo el nombre de la institución o bien las palabras clave de nuestro problema clínico, los mega buscadores localizarán todos los sitios donde podemos hallar información al respecto. Se deben seleccionar aquellos pertenecientes a Universidades o Sociedades Científicas. Descartando sin ningún tipo de contemplación las otras direcciones, puesto que no nos alcanzará el tiempo para leer todo lo publicado, que haya pasado por una selección de calidad previa, como para perderlo leyendo artículos sin filtro previo.

En los sitios de las Universidades y Sociedades Científicas es recomendable localizar: Consensos, Task Force, Review (Revisiones), Practice Guidelines (Guías Prácticas) y actualmente las llamadas Critical Review (Revisión Crítica).

Algunas de las organizaciones internacionales sugeridas para consulta son: La OMS (Organización Mundial de la Salud), la OPS (Organización Panamericana de la Salud), Cochrane (caracterizado por sus revisiones sistemáticas, indexadas al Medline desde el año 2000),y Revistas de prestigio internacional.

Existen en la Red sitios que ayudan en la búsqueda de información confiable. La comunidad Médica en los últimos años se abocó intensamente a la difusión de los conocimientos médicos a través de la Red y esto generó que surjan sitios médicos con el fin de facilitar y ayudar, tanto a profesionales de la salud como a pacientes, en la búsqueda de información. Uno de estos sitios de mayor prestigio es el de la Fundación HON creada en 1995, específicamente para la búsqueda de información médica en la Red y que cuenta con el aval de la OMS, la Comunidad Europea y el NCBI (Centro Nacional de Información Biotecnológica de EEUU).

 

Conclusión : Para la búsqueda en Internet, de información medica confiable, es fundamental tener claridad respecto al problema que nos atañe y seleccionar la palabra clave adecuada. Consultar sitios con información que pasaron el filtro de una selección previa. Se sugiere visitar base de datos prestigiosas, sitios de Universidades, Sociedades Científicas y Organizaciones Internacionales de Salud. Con respecto a la rapidez de la búsqueda esta se halla en estrecha relación con un aprendizaje previo y con la frecuencia que se realiza.

 

BIBLIOGRAFIA

1.       Real Academia Española

2.       Enciclopedia Hispánica. Encyclopedia Britannica Publishers, Inc. Kentucky, Estados Unidos de América. 1993

3.       VISOR Enciclopedias Audiovisuales S.A., Argentina 1999

4.       literature. J Am Med Inform Assoc 2001 Jul-Aug ;8(4) :317-23

5.       Sackett DL, Haynes RB, Guyatt GH, Tugwell P. Epidemiología clínica. Ciencia básica para la medicina clínica. México :Editorial Médica Panamericana,1998 : 2da edición : 299-411

6.       Verhoeven AAH, Boerma EJ, Meyboom-de Jong B. Management of bibliographic information by Dutch researchers in general practice. Family Practice 1997 ;14 :69-72

7.       Ely JW, burch RJ, VinsonDC. The information needs of family physicians : case-specific clinical questions. J Fam Pract 1992 Sep ;35(3) :265-9

8.       Roa R, Ruiz Morosini ML, Siede JA. Medicina Familiar. Hacia un nuevo modelo de la salud. Buenos Aires : Librería AKADIA Editorial, 1997 : 1-11.

9.       Oliveri N, Sosa-Iudicissa M, Gamboa C. Internet, Telemática y Salud. OPS, OMS y IMIA. Buenos Aires : Editorial Médica Panamericana, 1997 : 139-52

10.    Federación Argentina de Cardiología www.fac.com.ar

11.    Bessell TL, McDonald S, Silagy CA, Anderson JN, Hiller JE, Sansom LN. Do Internet interventions for consumers cause more harm than good ? A systematic review. Hesalth Expect 2002 Mar ;5(1) :28-37

12.    Loring KR, Laurent DD, Deyo RA, Marnell ME, Minor MA, Ritter PL. Can a back pain E-mail Discussion Group improve health status and lower health care costs ?. Arch Intern Med. 2002 ;162 :792-796

13.    Johnson KB. Barriers that impede the adoption of pediatric information technology. Arch Pediatr Adolesc Med 2001 Dec ;155(12) :1374-9

14.    Cabell CH, Schardt C, Sanders L, Corey GR, Keitz SA. Resident utilization of information technology. J Gen Intern Med 2001 Dec ;16(12) :838-44

15.    Droste S. Systematic literature search to make HTA (health technology assesment) reports. Z Arztl Fortbild Qualitatssisch 2001 Aug ;95(8) :549-53

16.    Don Fallis, Frické M. Indicators of Accuracy of Consumer Health Information on the Internet. Journal of the American Medical Informatics Association 9 :73-79 (2002)

17.    McKibbon KA, Walker-Dilks CJ. The quality and impact of MEDLINE searches performed by end users. Health Libr Rev 1995 Sep ;12(3) :191-200

18.    Klein MS, Ross FV, Adams DL, Gilbert CM.Effect of online literature searching on length of stay and patient care costs. Acad Med 1994 Jun ;69(6) :489-95

19.    Pao ML, grefsheim SF, Barclay ML, Woolliscroft JO, Shipman BL, McQuillan M. Effect of search experience on sustained MEDLINE usage by students. Acad Med 1994 Nov ;69(11) :914-20

20.    Wood FB, Wallingford KT, Siegel ER. Transitioning to the Internet : results of a National Library of Medicine user survey. Bull Med Libr Assoc 1997 Oct ;85(4) :331-40

21.    Chimoskey S J, Norris T E. Use of MEDLINE by Rural Physicians in Washington State. J Am Med Inform Assoc. 1999 July ;6(4) :332-333